confesiones

Mujeres de Montevideo: Lucía

01 Apr 2016

Ferpectas

“Hacer lo que te gusta es clave para una vida feliz. Me parece que todos los días hay momentos en los que se es feliz. Algunas veces más, algunas veces menos. La clave es hacer lo que a uno le gusta y, a las cosas que no nos gustan, también ponerles buena energía siendo real con uno mismo que al final es lo más difícil.

Tuve la suerte de poder dedicarme a la profesión que me gusta y siento que todos los días elijo la vida que quiero. De la cocina aprendí la paciencia, el orden, el trabajar en equipo, el entendimiento de los procesos… Lo que más me enseñó trabajar en esta profesión es el trabajo en equipo, el entender que no todos somos iguales, el sentido común es muy relativo y por eso hay que ser paciente.

El desafío más grande al que me enfrenté fue ser independiente. Yo trabajé durante mucho tiempo con Francis (Mallman) y cuando tuve que tomar la decisión de saltar al vacío fue bastante movilizador. Después me dio muchas alegrías y hasta hoy lo hace. Creo que el hecho de decidir qué quiere hacer realmente uno es el momento de más duda o adrenalina. Es mostrarse como uno es que es difícil. No tener miedo del qué dirán.

Y me parece que eso sucede en todos los ámbitos de la vida, no solo en el trabajo. Lo que siento es que cuanto más uno va decidiendo y haciéndose cargo de las cosas que le hacen bien, las cosas que le hacen más feliz, es cuando estás mas segura de vos misma. Lo más complicado es pararse en un lugar y decir, ‘esto soy yo, y esto es lo que tengo para ofrecer’. Y si se tiene seguridad, no hay un cuestionamiento.

Tengo ciertos rituales que me dan mucha felicidad, que tienen que ver con el descanso. Me gusta mirar películas en la cama, es como el día en que siento felicidad absoluta. Me tomo un desayuno y miro una buena película, y son de esos rituales que disfruto.”

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“Mi abuela y mi madre siempre me dijeron ‘creéte linda’, que no sé si es muy valioso o no, pero en esta era en la que vivimos los estereotipos de belleza también son importantes. El ‘creéte linda’ no era desde un estereotipo de belleza Claudia Schiffer, no. Era más como ‘sabéte linda, sabé que sos un ser lindo, que ante los demás tenes que pararte con seguridad’. Mi mamá siempre nos decía eso. Somos tres hermanas mujeres y la verdad estuvo bien en decirnos eso. Como mujer adolescente, cuando te sale un grano y tenés miles de dudas y pensás en si tenés o no tenés tetas… está bueno tener esa seguridad de decir ‘yo soy así y con esto soy linda’.

Percibo a la mujer uruguaya con mucho poder, veo muchas mujeres muy interesantes haciendo cosas lindas. Tengo muchas amigas que son mujeres de armas tomar, y eso me gusta. Las veo con poder de decisión.

Yo estoy acá hace 10 años y veo que cada vez hay más mujeres que están en puestos en los que antes no estaban. Igual creo que esto es mundial. Este cambio está pasando en todos lados. Y Uruguay, aunque es un país chico, se adapta.”