Bienvenida a esta sección donde hablaremos del amor, la astrología y cómo podemos comprender un poco más a nuestra pareja. A continuación, una breve introducción sobre las relaciones amorosas y el signo donde está la Luna en nuestra carta Astral.

 

Introducción:

 

El amor es una potencia misteriosa, mágica e indefinible. Desde que el ser humano tiene uso de razón, es que ha intentado a través de mitos y cientos de estudios, escritos y poesías intentar comprender más esta fuerza sobre natural. La curiosidad ante la química y las resonancias que se disparan cuando alguien nos mueve esas fibras internas es indiscutible.

 

A nivel astrológico podríamos decir que en ese primer flashazo hay elementos relacionados al signo del zodíaco donde tenemos al Sol, la Luna, Marte, Venus y el Ascendente. Sin embargo, cuando ya vamos empezando a intimar con la otra persona, el planeta principal que se impone tiene relación con la Luna.

 

La Luna:

 

La Luna simboliza el primer contacto amoroso en pos de satisfacer nuestras necesidades emocionales. Cuando nacemos, somos esponjitas que absorbemos todo y según cómo se fueron alimentando estas necesidades de sobrevivencia (calor, amor, contacto, etc) es que también se va “determinando” nuestra forma de amar una vez adultos/as.

La importancia del desarrollo y la madurez humana es justamente ir poniéndole luz o consciencia (representado por el Sol) a esos registros inconscientes (Luna) que se plasmaron en esa primera etapa para transformar nuestra forma de amar, siendo coherentes con quién realmente somos.

 

Desde ahí que para hablar de amor, y cómo comprendernos a nosotros y a la pareja, necesitamos saber sobre la Luna y el signo del Zodíaco donde está posicionada en nuestra carta astral.

 

SOBRE LA LUNA EN VIRGO:

 

La Luna nos habla de las emociones y Virgo, signo de tierra y regido por Mercurio, está orientado hacia el mundo terrenal y mental. Las memorias y el pasado buscan hacer compost en la tierra, transformar hábitos automáticos heredados del árbol genealógico.

Por esto, quien haya nacido con luna en Virgo debe aprender a atender sus emociones para reconocer si son la voz de su alma o la voz de los miedos transgeneracionales.

Virgo siente para discernir y ordenar su mundo interior y, en esa labor, también ordena memorias ancestrales.

 

Lo que viene a transformar:

 

La Luna en Virgo viene aprender a materializar satisfaciendo sus necesidades emocionales; aprender a concretar en base a lo que su alma pide expresar. Son lunas que tienen la cualidad del servicio muy presente. Servir con amor y desde el amor a la comunidad y al otro.

 

Lo que tiene que cuidar es no tornarse muy mental y pragmática, cultivar la presencia para no ponerse en segundo o tercer lugar, dado que muchas veces el servicio no viene de la voz del alma sino que por el miedo al abandono o rechazo. Es decir, el mecanismo inconsciente de esta Luna, podría decir: “hago y te doy para sentirme útil y así tú me necesites, de esta forma puedo controlar que no me abandonarás ni rechazarás”. Virgo, y al igual que Piscis, puede caer en la tentación de volverse madre o terapeuta de la pareja; lo que a la larga inhibe la expresión auténtica.

 

Tema central de la infancia:

 

Estas Lunas tienen un alto nivel de sensibilidad y buscan sentirse queridos y amados aprendiendo a no molestar y ayudando ante las dificultades que se presentan en el hogar. Muchas veces son niños/as que terminaron “cuidando” inconscientemente a mamá, asumiendo roles que no les pertenecían a su edad. De ahí que aprendieron de muy pequeños a “no sentir”, mentalizar y lograr soluciones racionales. También, podrían ser niños/as que se sintieron muy juzgados cuando fueron espontáneos y auténticos, por lo que de pequeños aprendieron a esconder esos aspectos más “locos” de sí y sobre adaptarse al medio ambiente.

 

Estas actitudes, ya de grande, podría inhibir la expresión auténtica, el juego, la espontaneidad, la capacidad de abrirse a nuevas perspectivas y caminos.

 

Deben aprender a desapegarse del dominio mental para profundizar en su propia esencia a través de la atención de lo que están sintiendo internamente en aceptación y cobijo.

 

 

La Luz de la Luna en Virgo:

 

Estas lunas son como madres en la tierra. Una vez que aprendieron a reconocer el miedo al abandono o al rechazo, a conectar con su mundo emocional y lo que realmente están sintiendo tienen el poder de curar al mundo con la expresión y materialización de sus propios talentos.

 

Son personas intuitivas, inteligentes, rápidas para entender, adaptables y comprensibles hacia el mundo interno de los demás.

 

En la intimidad:

 

En la intimidad son personas que les gusta dar mucho de sí. Las formas de dar y que le den amor son prácticas, es decir, si alguien está en problemas va a buscar el manual de instrucciones para solucionarlo. A su vez, buscan entregarle valor al cotidiano haciendo actividades distintas o entregando detalles o regalos.

 

Son personas que les gusta sentirse admirados y reconocidos/as por el trabajo que realizan en la relación de pareja, el orden de la casa y por sobre todo en su propia vocación.

 

En síntesis, si tú eres Luna en Virgo, o tu pareja o tu hija/o lo son, es fundamental:

 

–Conectar con el mundo emocional, atenderlo y darle voz.

 

-Reconocer cuáles asuntos internos son propios y cuáles de los patrones transgeneracionales.

 

-Aprender a conectar con la propia raíz interior para no perderse a sí mismo cuando está en una relación de pareja.

 

-Observar si cuando da o hace algo por los demás es genuino o es por miedo a que lo abandonen, rechacen o no acepten.

 

-Son personas que les gusta el orden y hablar con claridad, de la manera más terrenal posible.

 

-Les gusta aprender cosas nuevas e intentar comprender la realidad.

 

– Si tu pareja es luna en Virgo, recuerda que le gusta sentirse apreciada/o y útil por lo que hacen en su cotidiano.

 

-Tienen una mente veloz lo que los hace hacer asociaciones muy rápidas. Buen talento para los chistes.

 

-Una actividad de día podría ser ir a vitrinear a una feria-mercado donde venden reliquias para el hogar, luego almorzar en alguna picada y culminar la tarde viendo algún humorista o en un stand up comedy.

 

Si tienes dudas o comentarios, escríbeme a elcantoastral@gmail.com

 

 

Un abrazo,

 

Valentina Celedón M

 

@elcantoastral