vida sana

7 mitos sobre el entrenamiento de fuerza en mujeres

15 Jun 2023

El entrenamiento de fuerza es una disciplina que a menudo se asocia más con los hombres que con las mujeres. Sin embargo, cada vez más mujeres están descubriendo los beneficios de incluir el entrenamiento de fuerza en su rutina de ejercicio. A pesar de esto, todavía existen varios mitos y conceptos erróneos en torno a este tema. En este artículo, desmentiremos siete de los mitos más comunes sobre el entrenamiento de fuerza en mujeres y destacaremos la importancia de incluirlo en cualquier programa de ejercicio.

 

  1. El entrenamiento de fuerza hará que las mujeres se vuelvan “voluminosas”:

 

Una de las preocupaciones más comunes entre las mujeres es que el entrenamiento de fuerza las hará lucir excesivamente musculosas o “voluminosas”. Sin embargo, esto no es cierto. A diferencia de los hombres, las mujeres no tienen la misma cantidad de testosterona, una hormona clave para el aumento significativo de la masa muscular. El entrenamiento de fuerza en mujeres tonificará y fortalecerá los músculos, pero no provocará una ganancia desproporcionada de volumen.

 

 

  1. Las mujeres deben hacer ejercicios cardiovasculares en lugar de entrenamiento de fuerza:

 

Si bien los ejercicios cardiovasculares son excelentes para la salud cardiovascular, el entrenamiento de fuerza no debe ser descartado. El entrenamiento de fuerza ofrece beneficios únicos, como el aumento de la masa muscular, la mejora de la densidad ósea y el metabolismo basal. Combinar ambos tipos de ejercicio en una rutina equilibrada es ideal para obtener resultados óptimos.

 

  1. El entrenamiento de fuerza es peligroso para las articulaciones de las mujeres:

 

Este mito es infundado. De hecho, el entrenamiento de fuerza adecuado y bien supervisado puede fortalecer los músculos alrededor de las articulaciones, lo que puede ayudar a prevenir lesiones y mejorar la estabilidad. La clave está en realizar los ejercicios con la técnica adecuada y no excederse con el peso utilizado.

 

 

  1. El entrenamiento de fuerza solo es eficaz para hombres jóvenes:

 

La capacidad de construir fuerza y ​​ganar masa muscular no está limitada por la edad o el género. Las mujeres de todas las edades pueden beneficiarse del entrenamiento de fuerza. A medida que envejecemos, es aún más importante mantener la fuerza muscular para preservar la salud y la autonomía.

 

  1. Las mujeres deben usar pesas ligeras y hacer muchas repeticiones:

 

Este mito se deriva de la idea de que las mujeres deben evitar levantar pesas pesadas. En realidad, el levantamiento de pesas más pesadas con un rango de repeticiones adecuado es fundamental para estimular el crecimiento muscular y desarrollar fuerza. Las mujeres pueden y deben desafiarse con cargas adecuadas a sus capacidades.

 

  1. El entrenamiento de fuerza causa rigidez muscular en las mujeres:

 

Este mito es incorrecto. El entrenamiento de fuerza adecuado, complementado con estiramientos adecuados, puede mejorar la flexibilidad y la movilidad en lugar

 

de causar rigidez muscular. Además, el fortalecimiento de los músculos puede ayudar a prevenir lesiones y mejorar el rendimiento en otras actividades físicas.

 

 

  1. El entrenamiento de fuerza no es necesario para perder peso en mujeres:

 

La combinación de entrenamiento de fuerza y ejercicio cardiovascular es una estrategia efectiva para la pérdida de peso. El entrenamiento de fuerza ayuda a construir masa muscular magra, lo que a su vez aumenta el metabolismo y ayuda a quemar más calorías durante el reposo. Además, el entrenamiento de fuerza ayuda a mejorar la composición corporal, lo que significa que las mujeres pueden perder grasa y ganar músculo al mismo tiempo.

 

El entrenamiento de fuerza es beneficioso para las mujeres en muchos aspectos, incluyendo la mejora de la fuerza, la salud ósea, la composición corporal y el bienestar general. Al desmentir estos siete mitos comunes, esperamos que más mujeres se sientan motivadas a incorporar el entrenamiento de fuerza en su rutina de ejercicio. Recuerda siempre consultar a un profesional antes de iniciar cualquier programa de entrenamiento.