vida sana

6 bebidas que no son tan buenas como creíamos

07 Aug 2020

Ferpectas

En el correr del día solemos darnos algún gusto con lo que tomamos. Un juguito en el quiosco, un agua saborizada en el supermercado y un smoothie para llevar en un café. Pero, ¿sabemos realmente qué estamos consumiendo? 

Si bien nos dicen que estas bebidas suelen ser ricas en vitaminas, hechas con fruta fresca y que son muy saludables; debemos tener en cuenta las siguientes recomendaciones antes de volver a consumirlas. ¡Atenti! No todo es lo que parece.

1. Jugo de frutas envasado

Al contrario de lo que suele decir en la cajita o en la botella, el jugo de frutas envasado no es “una manera fácil de ingerir una o dos de las cinco frutas recomendadas por día”. La mayoría de los jugos comprados están pasteurizados y eso destruye muchísimos nutrientes valiosos y, encima, concentra azúcares. Además, el jugo se obtiene de la fruta entera pero dejan de lado la fibra, lo que lleva a una absorción lenta del azúcar en la sangre.

2. Refrescos

¿Sabías que una lata de gaseosa común tiene el equivalente a ocho cucharadas de azúcar? Eso es mucho más de lo que se recomienda para el consumo en todo un día y lo estaríamos ingiriendo en una sola bebida.

3. Refrescos light o cero

Está muy bien que busquemos reemplazar una gaseosa regular por una light (que tiene bajo contenido de azúcar) o cero (completamente sin azúcar). De todas formas, debemos tener en cuenta que los endulzantes artificiales pueden ser mucho más dulces que el azúcar de por sí y, en consecuencia, generan antojo de picotear cosas dulces.

4. Smoothies o batidos comprados

A no confundirse: que tengan los colores de nuestras frutas preferidas, no implica que sean sanos. Algunos smoothies pueden tener inclusive más azúcar que los refrescos. Lo más probable que es que esas frutas también hayan pasado por un proceso de pasteurización, por lo que se perdieron todos los nutrientes.

5. Aguas con vitaminas

“Si una bebida es rica en vitaminas es buena para vos”, ¡no necesariamente! Para hacerlas, les agregaron vitaminas, sí, pero probablemente también le hayan puesto azúcares y saborizantes. La típica botella de “vitaminas saludables”  tiene aproximadamente 8 cucharadas de té de azúcar. Conclusión: mejor obtener nuestras vitaminas de las frutas y vegetales frescos. Más barato, sano y rico.

6. Aguas saborizadas

Están catalogadas como “saludables”, pero muy pocas veces lo son. Las frutas de las propagandas y la botella dan la idea de natural, pero a veces tienen azúcar o más endulzante artificial que una gaseosa y, lo peor, pueden hasta costar el doble que una botella de agua normal.